Se acabó la liga, nadie dijo que fuera fácil, nadie dijo que nos fueran a regalar nada, pero al final lo conseguimos, somos los campeones, somos de preferente. El fútbol fue justo, no siempre lo es, pero al final el trabajo realizado durante estos diez largos meses ha acabado con un final feliz.
Fue allá por el mes de julio cuando empezamos, primero con el calor, las nuevas caras, los nuevos compañeros, una nueva forma de trabajar; luego vino el invierno, el frío y la temporada de recolección de la aceituna, siempre la época más delicada, la época más dificil. Con el sacrificio de cada integrante de la platilla conseguimos ser un equipo a las duras y a las maduras, luchamos cada partido hasta el final, y lo conseguimos. Todo salió a la perfección. Siempre repaldados por una maravillosa afición que llenaba campo propio y ajeno, que nos daba aliento y calor en cada minuto del partido, que nos hacia dar el último sprint por duro que fuera éste... ha sido un año increíble, GRACIAS.
Pero queda el remate, queda jugar la copa, competición complicada por el nivel de los equipos que en ella compiten, pero que la pelearemos como siempre y, quien sabe, lo mismo damos la campanada; no será por, lucha y sacrificio. Sólo será una pequeña dosis de lo visto todo el año.
Lo dicho, tras lo bueno y el tiempo de celebración, vuelve la competición, serán más o menos partidos, pero será un broche de oro y una forma muy digna de cerrar esta temporada con la que todos hemos difrutado.
GRACIAS A TODO EL PUEBLO DE ESCAÑUELA, SOIS INCREIBLES
Ahora podemos gritar sin temor a equivocarnos aquello que dice...
¡Escañolense Campeón!
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